Por primera vez, misiles balísticos de corto alcance ATACMS facilitados a Ucrania por EEUU han sido utilizados para atacar una instalación militar rusa en la ciudad de Karáchev, región de Briansk situada a 380 km de Moscú.
El presidente Biden se quiere despedir así, tras su estrepitosa derrota electoral, apoyando una peligrosísima escalada militar en Ucrania (por un supuesto despliegue de tropas de la RPD de Corea que nadie ha visto ni demostrado), que sólo producirá más muerte y destrucción, retrasando una salida negociada para poner fin a la guerra y poniendo de nuevo en peligro a toda la humanidad.
Cómo repuesta al ataque, el presidente Putin firmaba un decreto reformando la doctrina rusa de disuasión nuclear, estableciendo que la agresión de cualquier Estado contra la Federación de Rusia por parte de Estados que no disponga de armas nucleares, con la participación o el apoyo de un Estado con armas nucleares, será considerada un ataque conjunto. Es decir, Rusia considera a partir de ahora que los ataques contra su territorio son ataques conjuntos de EE. UU. y Ucrania.
El PCE denuncia está nueva escalada de EEUU y la OTAN contra Rusia y denuncia esta escalada militar que pone en serio riesgo la seguridad europea e internacional. A la vez, creemos que Rusia no puede caer en la provocación ni hacerle el juego a EEUU respondiendo con una peligrosa escalada nuclear.
El PCE lamenta que las instituciones de la UE sigan apoyando una salida militar a la guerra de Ucrania, en lugar de centrar sus esfuerzos en iniciativas de desarme y diplomáticas para construir una seguridad compartida europea.
El PCE hace un llamamiento a todas las fuerzas políticas y sociales, a los movimientos pacifistas, para exigir un alto el fuego en Ucrania y secundar las iniciativas internacionales que reclaman un alto el fuego para negociar una salida diplomática a la guerra de Ucrania.