Una marea de gente acompañaba al candidato a la presidencia de Colombia, Gustavo
Petro, por el pasillo central del salón de actos de UGT Madrid en su camino al escenario. El
representante de Pacto Histórico, una coalición de partidos de izquierdas, es uno de los
candidatos favoritos para ocupar el puesto que ahora ostenta Iván Duque, acusado durante
el acto de convertir el país Latinoamericano en un “estado narcoparamilitar”.
En el gran salón de actos de la sede de UGT en Madrid ondean banderas colombianas e
indígenas y pancartas en apoyo a Petro. Pacto Histórico reunió a decenas de colombianos y
colombianas, muchos de ellos exiliados en España, que dedicaron numerosos cánticos y
proclamas al cambio que puede representar Gustavo Petro en su país. “¡Se vive, se siente,
Pedro presidente!” se pudo escuchar a lo largo de todo el acto, antes incluso de llegar el
candidato.
Las candidatas de Pacto Histórico agradecieron desde el atril la participación de los partidos
políticos españoles que se unieron al apoyo a Petro, entre ellos Izquierda Unida, Podemos y
PSOE, y a los sindicatos CCOO y UGT. Uno de los temas centrales en la presentación del
esperado acto fueron los derechos de los migrantes; esas personas que conforman
actualmente la esencia de la colombianidad y que son la cara del éxodo. “Nos trae aquí el
anhelo de una vida digna”, dijo Yolanda Villavicencio, Presidenta de América España
Solidaridad y Cooperación (AESCO).
Durante las intervenciones, fueron continuas las menciones a la importancia que tienen en
estas elecciones el voto de las mujeres y de los jóvenes. Quisieron acercarse a ambos
colectivos dejando claro que las mujeres “son la columna vertebral de la lucha en Colombia”
y que es el turno de los jóvenes para combatir el racismo y la exclusión social.
Tras estas intervenciones, en un ejercicio de pluralismo y diversidad característica de la
colombianidad, presentaron a importantes activistas sociales e integrantes del proyecto
político de Petro, incluyendo a víctimas de amenazas por su ideología y lucha.
Fueron numerosos los elogios que recibió el gobierno de coalición de España, al ser
considerado un ejemplo a seguir por el proyecto de Pacto Histórico y por los asistentes, que
en varias ocasiones gritaron vivas a la coalición formada por PSOE y Unidas Podemos. Las
intervenciones de formaciones políticas y sindicatos españoles comenzaron con la
intervención de Jesús Gallego, de UGT, quien condenó la represión sufrida en Colombia a
manos del Gobierno. “Petro significa el cambio, el pacto histórico” dijo Gallego, haciendo ver
que Colombia “debe dar la vuelta a la arepa”. Remató su discursó compartiendo una crítica
a los partidos que no estuvieron presentes en el acto. Tras él, subió al atril Hana Jalloul
como representante del PSOE quien, además de enumerar los logros del Gobierno, trasladó
que desde el Partido Socialista están “convencidos de que vamos a celebrar la presidencia
de Gustavo Petro”.
Por su parte, Cristina Faciaben de CCOO afirmó que este era “un pacto inclusivo creado
desde la diversidad”, mandando un saludo fraternal a los sindicatos colombianos que
participaron activamente en la negociación por la paz. “Solo un gobierno de izquierdas
puede garantizar la justicia social”, dijo. En representación de Izquierda Unida tuvo lugar la
esperada y vitoreada intervención de Enrique Santiago, cuyo papel fue muy destacado en
las negociaciones de paz entre el gobierno colombiano de Juan Manuel Santos y las FARC.
Santiago afirmó que se necesitaba “paz frente al interminable conflicto interno”, y que “el
negocio de la muerte puede acabar en Colombia” con la presidencia de Petro y un
programa que cumpla el acuerdo histórico de paz en el país. Puso el broche final a su
discurso con una referencia a una gran obra de la literatura colombiana: “con tu victoria,
Gustavo, por fin las estirpes condenadas a cien años de soledad tendrán la segunda
oportunidad sobre la Tierra”. Finalmente, Idoia Villanueva quiso transmitir desde Podemos
que los colombianos eran “inspiración” para la izquierda.
En último lugar, el candidato a la presidencia de la República de Colombia tomó la palabra.
En su discurso de campaña afirmó que en su país hablar de sindicatos o salario “lleva a la
muerte”, y cumplir el pacto histórico es, irremediablemente, “cumplir con los objetivos del
milenio”. En un ejercicio de comparación con España, puso de ejemplo la Transición
española como un anhelo de su formación política, que quiere transicionar de un gobierno
“narcofeudal” en palabras de Petro, a un país que reivindique la sociedad indígena, el
feminismo, la juventud y que no bloquee “la internacional de los fascismos”. Para Petro y
para muchos de los asistentes, “el virus de la pandemia fue Duque”.
El acto finalizó de noche pero dejando bien altos los ánimos. Eventos como este de
campaña electoral en países como España son clave dada la importancia del voto de los
exiliados colombianos residentes en ciudades como Madrid, Valencia o Barcelona. Petro se
encamina a unos comicios que pueden significar otra victoria más para la izquierda,
siguiendo la de Gabriel Boric en Chile o Xiomara Castro de Zelaya en Honduras.