El PCE defiende la salida de España de la OTAN por ser una maquinaria de guerra al servicio de los grandes capitalistas de EEUU y la Unión Europea para someter a otros pueblos y por situar a nuestro país y a nuestro pueblo en una situación peligrosa contraria a los intereses de la mayoría. Además, denunciamos el incumplimiento sistemático de las condiciones de permanencia aceptadas por el pueblo español en referéndum, lo que supone un fraude y una burla a la democracia.
En la actualidad, la estrategia de la OTAN es la confrontación por todos los medios con China y con Rusia. Un peligro para la paz y la estabilidad. Por ahora esta confrontación pasa por la guerra comercial, económica y mediática, por eso es muy preocupante que Biden continúe con la exigencia de que los países de la UE gasten más en armamento, siguiendo la senda iniciada por Obama y seguida por Trump, lo que no puede entenderse más que como una escalada armamentística.
España debe apartarse de esa vía agresiva y criminal, que tanto dolor, muerte y sufrimiento ha causado ya en la antigua Yugoslavia y en Oriente Medio, con la destrucción de países: Irak, Afganistán, Libia, Siria Yemen. Esa vía que trae como consecuencia los actos terroristas de venganza que siempre, siempre, hasta ahora solo ha sufrido el pueblo, la gente común, que pasea por las calles o que sube a los trenes de Cercanías. La calle tuvo razón cuando gritó: “vuestras guerras, nuestros muertos”.
Señalamos la hipocresía y el cinismo de la OTAN al hacer la acusación de que China y Rusia “amenazan el orden internacional basado en reglas", cuando estos países no han incumplido ninguna resolución de la ONU, ni existe ningún caso en otros organismos internacionales, mientras mantiene excelentes relaciones con los regímenes de Israel, Marruecos, Colombia o Arabia Saudí, campeones mundiales de la violación de derechos humanos.
Es obvio que la OTAN no está en confrontación con China y Rusia por esos motivos, sino por los intereses de las grandes empresas, empezando por el complejo militar-industrial de EEUU a quien viene sirviendo en última instancia el eventual inquilino de la Casa Blanca.
Nuestro país debe ponerse del lado la cooperación y el diálogo como bases para la paz y la concordia entre los pueblos del mundo, en el marco de las Naciones Unidas y del derecho internacional. Esa es nuestra posición, esa es nuestra propuesta y ese es nuestro objetivo.
Somos conscientes de que la mayoría de la sociedad viene apoyando en las urnas a partidos que defienden la presencia de España en la OTAN y la participación con más o menos intensidad en su agenda de guerra y dominación. Y es por ello que debemos seguir advirtiendo de los peligros que supone participar en esa alianza creada por y para la guerra, por y para la defensa de los intereses de los grandes capitalistas y de su ansia insaciable de beneficios.
Nuestro Partido forma parte del Gobierno de España con sujeción a los contenidos del acuerdo firmado entre el PSOE y Unidas Podemos. Si bien, otros aspectos de la política nacional e internacional quedan fuera del mismo, debido a la correlación de fuerzas, siendo obvio que el PSOE, socio mayoritario, está legitimado para hacer su política desde el gobierno, al igual que el PCE, IU y Unidas Podemos estamos legitimados para defender nuestras posiciones ante la sociedad.
Por ello, el PCE muestra su rechazo a la celebración de la Cumbre de la OTAN en España en 2022. No hay nada que celebrar tras estos 40 años de guerras criminales.
¡OTAN NO, bases fuera! ¡No al militarismo, no al imperialismo, no a la guerra!